SE HACER ALGO MUY BIEN…… PERO SOY EMPLEADO
29.11.2012 10:17
El entorno de un colombiano hace que este no quiera ser emprendedor, le castra todas sus iniciativas y como si esto no fuera suficiente, incentiva el trabajo individualista.
Muchas personas en nuestro país tienen habilidades innatas y desarrolladas para hacer cosas impactantes y buenas, cosas que las hacen felices, pero no saben cómo explotarlas y terminan colocando sus virtuosas y potenciales habilidades al servicio de otros a cambio de una remuneración, la cual generalmente implica subordinación, rutina, desmotivación, insatisfacción y atrofiamiento de sus habilidades iniciales para hacer cosas buenas.
¿Cuáles son las causas del gran número de personas que pierden la motivación de ser generadoras de empleo?
Esencialmente Identifico 3 causas que sumadas y en forma secuencial hacen que no se desarrollen las habilidades de hacer cosas innovadoras en un Colombiano, estas son la familia, el sistema educativo Colombiano y las políticas gubernamentales.
La familia es el primer reto a superar porque los padres viven un modelo de subsistencia, les dio resultado emplearse para tener recursos económicos con los que sus hijos podrían llegar a ser o tener lo que ellos no fueron o tuvieron, entraron en una aparente zona de confort y de seguridad, la educación que recibieron les sirvió para asegurar más aun ese empleo, perciben que entre más tradicional y aceptado sea el titulo, mejor futuro tendrán en la vida, forman su propio escalafón en donde carreras como medicina, derecho, administración son las top y ven con no muy buenos ojos, carreras de tipo humanístico. Viendo esta situación desde niño, la tendencia será innevitablente enfocar todos los esfuerzos a tener el superpuesto.
El sistema educativo en el país es el segundo reto a sortear, pues es otro determinante para que nuestras habilidades no sean desarrolladas, ya que no alienta el desarrollo vocacional y estuvo diseñado por mucho tiempo para crear en las personas competencias que satisficieran necesidades especificas de las empresas, dejando de lado el desarrollo del saber hacer, de las experiencias reorganizadoras (acceso a nuevos haceres y saberes), y la creación de espacios significativos en la primera infancia; la formación de pedagogos en la educación media también se descuido, pues es común encontrarnos como profesores a ingenieros, tecnólogos, artistas u otro tipo de profesionales que no tuvieron éxito en sus áreas y que con un proceso de homologación y haciendo 3 semestres en una licenciatura en pedagogía, ya podían ejercer como pedagogos, adicionamos a esto el pensum rotativo y en constante prueba así como la no definición especifica de un modelo educativo; por último la educación superior tiene la característica de no ser investigativa, el presupuesto es altamente limitado y la calidad que se puede recibir depende del poder adquisitivo del estudiante, enfocando, en un altísimo porcentaje al individuo, a ser un acumulador memorístico de información sin opción de análisis y argumentación.
El último reto viene desde las políticas gubernamentales respecto a la puesta en marcha de las ideas y habilidades, pues tratar de ser independiente equivale a endeudamientos fuera de estándares internacionales, impuestos sin empezar a funcionar la empresa, trámites y beneficios solo para unos pocos. Dichas políticas tampoco se mantienen actualizadas en las necesidades de los ámbitos internacionales, lo que hace que no se tenga para el aparato productivo una visión de clase mundial.
Este modelo, hace que sea muy factible perder las habilidades de hacer cosas buenas, pero si no se pierden y persistimos en no ser empleados, en ser generadores, nos topamos con las dificultades gubernamentales que tienen como consecuencia final el desistimiento y tomar la ruta fácil de buscar un ingreso de subsistencia como el de los padres, llenándonos de personas que saben hacer cosas buenas pero que no saben cómo crear empresa, y al mismo tiempo, tendremos personas exageradamente capacitadas para manejar empresas, pero que no tienen desarrolladas las habilidades para hacer cosas buenas.